martes, 16 de abril de 2013

Entró el sol, salieron las flores

Los primero tulipanes del Molino
Ya era hora: es la exclamación de todos, menos los jabalíes que no son tan sensibles a este tipo de acontecimientos atmosféricos. El resto, jilgueros, mirlos, agateadores, chochines, arrendajos, lúganos, cucos, carboneros, cotovías y -sobre todo- los ruiseñores, que llevan tres días acompasando mis sueños con sus cantos amorosos. Eso, sin contar las mariposas que han aparecido revoloteando a tutiplén: limoneras, perladas, blanquitas de la col, blancas catalanas, y un pavo real que nos tejó turulatos cuando lo descubrimos, entre las budleyas, cerca de un arbusto de magnolia oriental que sustituye a la adelfas muertas por el frío. Yo creí que las pavo real llegaban más entrada la primavera, casi en verano.
Como botón de remate, brotaron los tulipanes negros. Que no son negros, claro, pero así se llaman. Brillan entre los demás, aunque los demás sean tan bonitos.
Os dejo aquí estos cantos de primavera y el deseo de que la vida os sonría aunque sólo sea por un instante. El instante que dura la belleza, el calor del sol, la felicidad, la vida misma.

2 comentarios:

estrella dijo...

Elvi, con retraso – como la prima Vera por aquí – llego a tu blog. Pero qué bien me ha sentado el canto del jilguero! . Besos, jardinera.

Elvi dijo...

Un abrazo, amable visitante.