martes, 7 de enero de 2014

Trincheras de la Primera Gran Guerra
Hace cien años que empezó la Primera Guerra Mundial; cien, de las predicciones tecnológicas del gran Nicola Tesla; cuatrocientos años desde que murió El Greco. Trescientos años de la muerte de un marino español, Blas de Lezo, que derrotó a la poderosa armada inglesa, causándole tanta humillación que aún se mantiene en los textos de historia ingleses la prohibición real de escribir su nombre.
También cumple cien años Platero y yo, el libro de Juan Ramón Jiménez que casi no escribe.
2014 es una cifra tal alta para año que hace cientos de alguna cosa notable, de algún personaje clarividente.
Cuando estalló la PGM nadie pensó que la tontería del Kaíser iba a durar tanto ni que fuera a producir tantos muertos. Después de tanto sufrimiento, de tantos muertos, de tanta pérdida, de tanto hundimiento, en Europa parecía que ya no volvería a ocurrir un horror de ese tamaño. Veintiun años después, estalla la Segunda Guerra Mundial. Otra vez la muerte sembrada por doquier.
En ambas ocasiones, dicen que la culpa la tuvo Alemania. En ambas, todos los hombres y las mujeres que pagaron con su vida la inmensa estupidez humana desaparecieron de la memoria, excepto en sus casas, para sus sucesores.
Que este año tan alto, 2014, sea compasivo con las buenas personas, con las gentes de buena voluntad. Haya paz.  

4 comentarios:

Poeta dijo...

Cien años del nacimiento de Octavio Paz, del que se preparan fastos en México.

estrella dijo...

100 años de tantas cosas que no han pasado a la historia, y que hicieron posible las que sí lo hicieron. Salud y paz.

Tocando el tambor dijo...

Hace 100 que nacieron también Cortázar y Nicanor Parra que sigue vivo. Bravo por él.

Tempus fugit dijo...

De casi todo hace 100 años.