lunes, 4 de octubre de 2010

Un cuarto propio


Cristina era como un hada, quizás lo siga siendo.
 Cristina cuidó de mi hija cuando ésta era pequeña, unos seis años. Cristina era muy joven entonces, recuerdo que tenía unos hermosos ojos azules y un carácter dulce; era una chica muy seria: podía confiar plenamente en ella. El tiempo y otras circunstancias nos separaron y ahora, tantos años después, la magia de la red de redes ha vuelto a ponernos en contacto.
Esta entrada en el diario es para deciros que Cristina tiene una librería en Ciudad Real donde, cuando se cierra la puerta, se enciende una luz cálida y directa que ilumina las mejores páginas de los libros que han cambiado a la gente para ser mejor. Desde fuera, puede verse movimiento y escucharse el sonido de las palabras, las risas, los susurros, como en esas tarjetas de Navidad que muestran un paisaje nevado y frío, azul, al anochecer, y una casita encendida, al fondo, dentro de la cual una imagina un ambiente tan agradable que quisiera poder estar dentro.
Os invito a entrar en esa casita. Acaba de cumplir un año. No he podido asistir, pero sí me han entrado unas ganas enormes de entrar a visitarla. Y lo haré.

10 comentarios:

El?? dijo...

Como Cristina es de Elda,y otras cosas, mando esta pequeña historia sobre la Peña del Cid.
En la foto,bandera Caput Castellae hizada en la cima.
Abajo vemos Elda y Petrer en las primeras horas de la mañana.

La noche la dormí en la Peña

Saludos Cristina

Elvira dijo...

Miguel, eres la monda lironda. Caminante impenitente, andariego desperezado, alpinista y reductor de desniveles. No hay quien pueda contigo.

me equivoqué dijo...

Perdona, estuve leyendo y me fuí a Clarisa Leal.donde dice viernes 24 de septiembre de 2010
TALLER PRESENCIAL: LA VOZ INTERPRETADA

Nace en Elda (Alicante) en 1976. Cursa estudios de nterpretación en Valencia y completa su formación en diferentes áreas como la locución, la dirección y la escritura

estrella dijo...

Bueno, miguel. Estas evitando mi blog o que?.

estrella dijo...

Elvia, esa librería parece de lo más acogedora. Sirven café los jueves? Cuando vivía en Chicago había una librería parecida en el barrio y los jueves se reunía un grupo de lectores para recomendar sus libros preferidos- entre ellos o al que entraba por allí - y tenía mucho éxito. Lo anunciaban en el periódico local. Suerte Cristina!

Manuel Montero dijo...

...

El orden de lo que olvido, al sonido del villancico, es como una mujer desnuda.

Volando estaban varios ángeles sobre la concavidad del corral.

¿Vienes conmigo? Angel o pura paloma, la puta es siempre Beatriz precediendo a Dante en la escalera de un Purgatorio de cama y bidet.

Atrapé una gallina por las patas en mi corral y para ti cometi con ella crimen pasional.

Debo excitar el animal para cantarte o para pintarte, y producir el vegetal para ocultarme en él cerca de ti.

La lejía por los suelos y yo que me acuerdo del día en que nací.

Revivir la roca a su exceso rosado por un fuego de rocío.

Una sucesión de indiscretos fotógrafos me saca de la tumba a saludar "descompuesto". Es mi vida desde que soy letra escrita. Quisiera pintarte desnuda y escribo poesía, qué mortificante, qué decadente, qué retahila de clichés.

Un rosario salido de un taller de subnormales no sería suficiente para perdonar a la jovencita. Reza por ella con las tripas de elefante del dios del vino.

...

Manuel Montero dijo...

otras greguerias chez moi.

Huérfanos de maestros dijo...

Y de Bibliotecas.

Para mí uno de los grandes descubrimientos y placeres que me ha dado Escocia.

!!Que cosas!!

Se pasa mejor el rato con historietas sobre El Cid que admirando a un tal Ramon y Cajal,y lo que representó la Comisión de ampliación de Estudios ahora que estamos en el centenario de su creación,de la cual fué presidente

Elvira dijo...

Muy bueno eso de EdimBurgos, Miguel. A veces se escapa lo más cercano y hay que salir lejos a encontrarlo. ¿Llovió mucho por EdimBurgos?

uncuartopropio dijo...

Qué bonito Elvira, hoy lo encontré de nuevo... Besos