lunes, 10 de septiembre de 2012

Tarta de manzana vegana
Diversas circunstancias, entre las que cuento la casualidad y el azar, me van haciendo vegetariana. ya me lo advirtió un amigo yogui: "a medida en que practiques yoga verás que dejas de comer animales", pero no le dí mayor importancia, entre otras cosas, porque yo no era una entusiasta de los entrecotes. El pescado, el jamón pata negra, los quesos -cuanto más malolientes (torta del Casar, gruyere suizo, manchego curado de oveja y cabra, parmesano regiano, chaume...)- sí que me encantaban. La profecía de mi amigo se ha ido cumpliendo inexorablemente. 
Pastas de algarroba
Quién me iba a decir a mí que el trozo de medio quilo de excelente idiazábal iba a quedarse muerto de risa en el frigo sin que yo le diera unos viajes a la hora del aperitivo. Con lo fácil que es hacerse un bocadillo y -sobre todo- con lo rico que está. Pues ahí sigue; lo digo para quien le apetezca.
Poco a poco, mi nevera carece de huevos, leche de vaca, yogures de leche de vaca y quesos ni cosa parecida. Tanto es así que he aprendido a prescindir de ellos y a sustituirlos cuando es menester. Dejo como muestra, la tarta de manzana, sin huevo ni leche, y las galletas de harina de algarroba, muy recomendables, por cierto. Y rico, rico, rico... 

5 comentarios:

Biula dijo...

La verdad es que lo más rico es lo que peor sienta pero ¡es lo más sabroso!. Lo dicen hasta los veterinarios: el pienso más barato y con más grasa es el que más les gusta a los animales. Otra cosa es cuando la salud o el monedero obliga ...

estrella dijo...

Pues yo, sin hacer yoga, voy por el mismo camino – sin llegar a tales extremos- me mantengo de fruta y almendras y picoteo el queso, que a pesar de no favorecer a mi colesterol me parece imposible dejarlo! Los mariscos (sin abusar) y el pescado residen en el frigo. Lo que estoy dejando casi por completo es el azúcar, vaya, todo lo dulce. Pero ya digo, no entiendo cómo está ocurriendo. Creo que se ha despertado en mí una neurona que ha permanecido dormida durante medio siglo…Como siga así voy a acabar sin saber que llevarme a la boca!

Practico las excepciones con frecuencia!

Ah! un buen Rioja nunca falta en casa.

elvi dijo...

Te enseñaré a hacer queso, Estrella. Sin leche de vaca, naturalmente. Creo que el cuerpo va guiando a los que son sensibles a sus llamadas.

estrella dijo...

Pues lo tienes que hacer porque no pasa un día que no recurra al queso, aunque sea en pequeñas cantidades. Y cómo les das sabores diferentes.

La tarta tiene un pinta de cómeme, pero me pregunto a qué sabrá

Elvi dijo...

Sabe rica, con un ligero toque de vainilla para brandy que compré en un super eco. Desapareció en un par de días de desayunos.
Los quesos pueden saber a lo que les pongas. Lo importante es dar con la masa base. A mí me gusta elaborarlos con agua enzimática de trigo o de avena.